Un invento raro, que nos sirve para ver cómo nos aseamos los
recovecos del oído con la ayuda de un pintoresco periscopio por el que
vemos el hurgamiento que realizamos en las cavidades auditivas. Muy
pronto saldrá a la luz una versión de este aparato con monitor incluido.
Normalmente los gorros de baño nos sirven para protegernos del agua,
pero así es demasiado aburrido… ¿por qué no inventamos uno que sirva
para mojarlo?
Su uso es fácil: ponérselo y llenar de agua la cavidad superior. Aparte de ser divertido, nos aseguran ciertas propiedades beneficiosas para el pelo: “Éste crece con más rapidez y frondosidad, ya que el agua penetra mejor en el cuero cabelludo por los poros”.
Como es un peñazo tener que sumergir los trozos de sushi en salsa de
soja cada vez que te los vayas a comer, lo mejor es que te proveas de
unos palillos con dispensador de salsa incorporados. Serás la envidia de
la mesa, ya que esto es tendencia en los círculos más exclusivos en
Tokyo, Paris y Nueva York.
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