lunes, 19 de marzo de 2012

¿Por qué las recién casadas cruzan el umbral de su casa en brazos del esposo?

Un gran número de historiadores coinciden en señalar al ‘pueblo godo’ como impulsores de la actual costumbre de entrar en brazos a la recién casada al interior de la casa.

El origen y razón se podría encontrar en la facultad que tenían los godos de ir a buscar una hembra de otro poblado cuando en el suyo no había suficientes. Evidentemente el único modo posible de hacerlo era a las bravas, por lo que llegaban al lugar, escogían a la mujer que querían que se convirtiese en su esposa, la cogían en brazos y la trasladaban hasta la casa donde debían convivir como pareja.

La norma indicaba que, para quedarse en propiedad con la mujer raptada, ésta no podía pisar el suelo durante el trayecto que iba desde el lugar del secuestro hasta el que iba a ser su nuevo hogar; si lo hacía quedaba en libertad. De ahí que fuesen llevadas en volandas.

Con los años, este acto se ha convertido en toda una tradición que envuelve un sinfín de significados de prosperidad.

Otra versión de la historia tiene mucho que ver con la que señala del rapto de mujeres, como realizaban los godos, pero cambia a sus protagonistas por los fundadores de la Antigua Roma.
En la leyenda romana de ‘el rapto de las Sabinas’ cuenta el mito del secuestro de mujeres de la población de Sabinia a manos de los fundadores de la Antigua Roma, para poder poblar de hembras lo que después sería la capital del gran imperio.
Famosa es la escultura realizada por Giovanni Bologna y varias las representaciones pictóricas que existen sobre el rapto de la Sabinas.

Existen otras versiones (menos fundamentadas) sobre el origen:
Hay quien apunta hacía un acto de romanticismo por parte del novio que, al llevar en brazos a la recién casada, hacía que la novia llegase descansada hasta el lecho conyugal, pero esta versión carece de credibilidad y documentación que demuestre su veracidad.
También están las explicaciones que tratan de fundamentar los amantes de lo esotérico, queriéndole dar a este acto un aire de superstición, al indicar como posible razón y origen que en la Antigua Roma se creía que el umbral de la casa era el lugar donde habitaban los espíritus malignos y para evitar que éstos se introdujeran en la contrayente, el novio debía traspasar la puerta llevándola en volandas. Eso les garantizaba un matrimonio largo, dichoso y con descendencia.

Otra versión (bastante absurda) es la que nos intenta explicar que se realizaba para evitar que la novia titubease a la hora de entrar en la casa y quedarse a solas por primera vez con el que ya era su esposo y se diera a la fuga. Motivo por el que el marido la entraba en brazos y así asegurarse una romántica y placentera noche de bodas.

Buho a 1000 f.p.s.

Pilotos italianos

Unos perro muy listos

Caidas en monociclo

Dibujando en la playa

Bajo el mar

Dios


¿Por qué el papel de aluminio tiene dos caras diferentes?

En efecto: una es brillante y la otra mate.
¿Y es mejor un lado que otro para envolver el bocadillo?
La mayoría de los sólidos se rompen al ser sometidos a presión, pero esto no ocurre con los metales. El aluminio, como el resto de los metales, es maleable. Así podremos aplastarlo al aplicarle la suficiente presión y extenderlo en láminas o en planchas. Y enrollarlo en láminas muy delgadas.
Pero ¿qué quiere decir maleable?

Los metales son maleables porque sus átomos se mantienen unidos mediante una serie movible de electrones compartidos, en lugar de estar unidos por fuerzar rígidas entre los electrones de un átomo y los del siguiente, como pasa en la mayoría de los sólidos.

Como un átomo en concreto no tiene una posición fija, puede cambiar de lugar manteniendo su enlace con uno u otro electrón, dependiendo de la presión a la que se vea sometido el metal.

En la fábrica de papel de aluminio se somete al aluminio a una gran presión hasta que se obtiene una lámina delgada, lo suficiente para devanarlo haciéndolo pasar entre pares de rodillos, para ir obteniendo progresivamente láminas más y más finas. Hasta conseguir alcanzar grosores de menos de dos centésimas de milimetro.

Para que la lámina no se rompa en el laminado en frío y para ahorrar espacio en el laminado final, se hacen pasar dos láminas a la vez entre los rodillos.

Así, las superficies que están en contacto con los rodillos de acero pulido, salen lisas y brillantes. Pero las superficies interiores, de aluminio contra aluminio, salen ligeramente rugosas y mates, ya que el aluminio es mucho más blando que el acero.
Aparte del aspecto, no hay ninguna diferencia entre una y otra cara, por lo que se puede usar cualquiera de ellas para envolver los alimentos.
A continuación un video explicativo del proceso.

Aprender a dibujar