domingo, 1 de junio de 2014

Microbios: cada año hay 600.000 contagios en hospitales


Mantener la asepsia en los hospitales no es tarea fácil. Incluso la forma y las veces en las que se lava las manos un médico resultan determinantes a la hora de infectar o no a sus pacientes. No en vano, a pesar de todas nuestras tecnologías asociadas a la esterilización, cada año 600.000 enfermos son afectados por una o varias infecciones contraídas en el hospital. Las infecciones relacionadas con la atención sanitaria causan 37.000 fallecimientos. Son las llamadas enfermedades nosocomiales (del latín nosocomium, hospital).
Según Giles Brücker, jefe del servicio de higiene de la Asistencia Pública de París, estas infecciones son la causa principal de mortandad para el 1 al 3 % de los enfermos infectados.
Tal y como lo explica Jean-François Bouvet en Hierro en las espinacas:
Las distintas cifras corresponden, como es lógico, a datos globales que no valoran las fuertes desigualdades existentes entre los servicios hospitalarios. Los más perjudicados por la infección son los de reanimación y de cirugía torácica, mientras que las maternidades, por ejemplo, se ven mucho menos amenazadas. La reanimación quirúrgica detenta una triste marca: más del 50 por ciento de los enfermos son víctimas de una infección en el servicio.
Estas infecciones los suelen provocar bacterias comunes, que penetran en el organismo a través de una herida o una sonda, o simplemente son gérmenes que consiguen doblegar el sistema inmune deprimido del enfermo. Es decir, que la propia ecología del hospital es la responsable de las infecciones: mucha gente enferma que recibe muchas visitas de familiares o amigos en un lugar concentrado.
Todas las estadísticas revelan que los riesgos de infección se incrementan con las dimensiones del centro. Tenemos ahí un medio ecológico especialmente favorable para que proliferen microbios. Paradójicamente, los progresos de las técnicas médicas propician la propagación de estos gérmenes al multiplicar los actos “intrusivos”: prótesis, catéteres, intubaciones, endoscopias… Por sí mismas, las sondas urinarias probablemente originan más de un cuarto de las infecciones nosocomiales.

Fuente

No hay comentarios:

Publicar un comentario