Las matrículas que se utilizaban en España hace unos años estaban divididas en tres partes bien diferenciadas: una primera que indicaba la provincia donde el coche había sido matriculado, una serie de números identificativos y una tercera parte formada por una o dos letras, también identificativas, pero la Dirección General de Tráfico decidió cambiar la estructura de las matrículas para fomentar la venta de coches entre provincias, quitando de las matrículas la primera parte.
Si bien antes se podían utilizar todas las letras del alfabeto, con la llegada de las nuevas matrículas esto no ocurre, ya que no se utilizan ningún tipo de vocal. Muchos de vosotros os preguntaréis el motivo de que sea así, siendo el único y el principal evitar que se forman palabras mal sonantes.
Recordemos que las actuales matrículas están formadas por un conjunto de cuatro números y tres letras, por lo que el uso de vocales en esa combinación podría dar lugar a palabras del tipo PIS, PEO, ANO… o abreviaturas como FBI, ONG, ONU…
Pero además de no utilizar las vocales, también hay otras letras del alfabeto que nunca nos encontraremos en las matrículas como son la Ñ y la Q por su parecido con la N y la O, así como la CH o la LL que no se utiliza por problemas de espacio en la matrícula.
Para finalizar, indicar que con este sistema de matriculación, se pueden crear hasta 80 millones de combinaciones posibles, lo que garantiza disponer de matrículas durante un buen puñado de años.
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