Una creencia muy común es que el agua de los océanos es azul por que
refleja el azul del cielo. Esta afirmación es cierta, pero hay también
otro motivo.
El agua tiene una ligera tonalidad azul por si misma. Las moléculas de
agua absorben luz de la parte roja del espectro, dando al agua una
tonalidad azul.
Esta cualidad del agua solo se puede apreciar cuando la cantidad es grande, como en el caso del mar.
Si le queda alguna duda de que el agua es azul nada mejor que una fotografía tomada en la Patagonia
chilena donde este fenómeno se aprecia con especial intensidad, dadas
las peculiares condiciones de iluminación de la región y la pureza del
agua dulce en forma de hielo.
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Fuente: medioambiente.org
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